domingo, 9 de febrero de 2014

“Interculturalidad, gestión de la convivencia y diversidad cultural en la escuela: Un estudio de las actitudes del profesorado” (Juan J. Leiva Olivencia)

El presente texto del Profesor Juan J. Leiva Olivencia pretende acercarnos el fenómeno de la interculturalidad y al tratamiento de la convivencia a través del trato y la actitud de los profesores para enfrentarse a esta diversidad cultural.
El texto queda estructurado en tres partes además de la introducción. Siendo esta parte precisamente por la que quiero comenzar:
La introducción que el profesor Leiva Olivencia nos presenta la podemos dividir en dos partes. En la primera parte el autor justifica el por qué de la realización de este trabajo. Para ello nos habla del importante auge que están viviendo nuestras escuelas en referencia al número de niños inmigrantes de distintos lugares, etnias, costumbres, lenguas y religiones. Esto según el autor es debido a los cambios producidos en nuestro país, pasando de ser un país emisor de inmigrantes a ser un país receptor. Además, reconoce que se dan casos de aulas multiculturales y del fenómeno de la multiculturalidad en nuestro sistema educativo no universitario. Como cifra nos da la de la presencia de alumnos inmigrantes en los cursos 1994/1995 y 2006/2007, donde ha sufrido una evolución exponencial hasta representar el 8,35% (591.560 alumnos). Pese a estas cifras, no representan un valor tan alto como puede ocurrir en otros países de nuestro entorno, pretendiendo destacar con ello sólo la rapidez en el crecimiento.
En la segunda parte, y una vez justificado el trabajo, nos detalla que se centrará en la actitud y tratamiento de los profesores de este fenómeno en auge, y como lo utilizan como valor educativo de primer orden.
El primer punto que toca el autor es el que denomina “Diversidad Cultural y Convivencia en la escuela intercultural”. Este apartado lo podemos estructurar en tres partes:
En un primer apartado el autor nos muestra lo que entendemos por multiculturalidad, es decir, la cohabitación de varias culturas dentro del marco escolar sin pretender ningún cambio en esas culturas, y con el fin de que el siguiente paso sea la interculturalidad.
La interculturalidad o lo intercultural es lo siguiente que plantea con el fin de romper con el etnocentrismo dominante, y observar los beneficios que provoca esa interculturalidad (intercambio de valores, romper prejuicios, y crear lazos de interdependencia entre los grupos).
Tras esto nos habla de la educación intercultural como un principio de reconocer a los otros y lo que esto supone en términos de semejanzas y diferencias, es decir, buscar una mayor democracia en el proceso educativo y sobre todo una mayor igualdad entre las personas. Al ser una educación basada en una acción teórico-práctica, cualquier propuesta intercultural que se presente buscará cumplir los objetivos de la educación intercultural, de los que hablaremos más adelante, y más concretamente, los propósitos fundamentales de la escuela intercultural (aprovechar esa diversidad cultural para obtener riqueza y beneficio).
El segundo punto que trata es la visión de los conflictos interculturales, en muchas ocasiones producidos por la propia institución escolar, la metodología del docente y su actitud hacia esa diversidad. Sin embargo, la escuela multicultural no busca eliminar esos comportamientos o prevenirlos, sino que considera esos conflictos como algo positivo a través de lo que aplicar estrategias de resolución de conflictos que permitan una mejor convivencia. Según el texto, esa mejor convivencia se produce no a través de cerrarse a las normativas disciplinarias o comunicativas que tenemos, sino se produce a través de la participación de los alumnos en la resolución de los conflictos, lo que permitirá, a través del dialogo y el respeto, establecer medios para discutir lo ocurrido y ver cómo puede mejorar ese clima de convivencia en la clase, tanto en el aula como a nivel general.
Por lo tanto la escuela intercultural apostará por una actitud de dialogo, cooperación e intercambio, es decir, apostará por aplicar sistemas democráticos o de convivencia democrática, participativos e igualitarios. No obstante, para que esto se produzca es necesario conocer los objetivos la Educación Intercultural, tercera parte de este apartado. Los objetivos de la Educación Intercultural son los siguientes:
ü  Conocimiento Intercultural:
o   Supone un progreso social y personal.
o   Conocer al otro es un reconocimiento y aceptación de que hay diversidad cultural.
o   Esto trae consigo la igualdad de oportunidades educativas y sociales.
ü  Convivencia Democrática:
o   Supone un progreso personal y colectivo.
o   Ayuda al aprendizaje de competencias sociales y emocionales gracias al análisis crítico y constructivo de la realidad socioeducativa.
o   Establece los conflictos como una oportunidad y punto de partida para el cambio e introducción de elementos innovadores en la escuela.
ü  Igualitarismo (Igualdad):
o   Nos permite reconocer singularidades culturales, evitando estereotipos que traigan consigo desigualdad social y cultural en la escuela.
o   Vemos la diversidad y la igualdad como algo positivo y enriquecedor.
o   Vemos a las personas como “sujetos libres, autónomos y responsables, con sus identidades personales y culturales diferenciadas, con igualdad de derechos, deberes y oportunidades”.
ü  Participación Comunitaria:
o   Nos permite revitalizar la democracia en la escuela.
o   Diálogo, comprensión y respeto mutuo como elementos claves en las acciones educativas.
o   Es un principio pedagógico que supone un reto para innovar en la práctica intercultural en la escuela
o   Supone un avance. Pasamos de reconocer la diversidad hasta la crítica interna y una mayor democratización cultural.
o   Debo destacar el ejemplo que pone de la participación de los padres de alumnos inmigrantes en la vida escolar para redondear una buena educación intercultural.
El segundo punto que trata el Profesor Leiva Olivencia es el denominado “Un Estudio sobre las Actitudes del Profesorado”. En él se establece una explicación de cómo se ha llevado a cabo el estudio. Utilizando una metodología cualitativa (realizando cuatro estudios de casos  donde se estudia el pensamiento pedagógico sobre el conflicto intercultural de cuatro docentes pertenecientes a distintos centros  de infantil y primaria y que realizan diferentes funciones docentes o responsabilidades educativas  y usando como medio la entrevista, la recopilación documental y el diario investigador) y una metodología cuantitativa (mediante la realización de un cuestionario a 41 docentes de infantil y primaria, repartidas entre 31 profesoras y 10 profesores). Además, especifica que estos docentes pertenecen a centros educativos públicos de Málaga donde se desarrollan proyectos educativos de educación intercultural y se han acogido al “Plan Andaluz de Atención al Alumnado Inmigrante de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía” presentando proyectos innovadores para tratar estos asuntos.
El objetivo principal de este estudio ha sido comprender y conocer como conciben los profesores los conflictos interculturales y cómo gestionan y regulan dichos conflictos, así como lo que consideran “acciones educativas interculturales”. Mientras que los objetivos específicos serían los siguientes:
Ø  Conocimiento de la naturaleza de los conflictos que se dan en las escuelas interculturales a partir de la comprensión de las percepciones y actitudes de los distintos miembros de la comunidad educativa.
Ø  Identificar lo que preocupa a los docentes sobre los distintos problemas de convivencia intercultural en sus centros escolares.
Ø  Qué problemas tienen a la hora de llevar a cabo su labor docente en estos centros.
Ø  Qué ideas y concepciones tienen los docentes cuando se encuentran frente a conflictos interculturales.
Ø  Las dificultades y conflictos que encuentra el alumnado inmigrante para su integración en el centro (qué piensan profesores, familia y el propio alumno).
Tras la explicación de los objetivos el estudio plantea las siguientes 5 preguntas que obtienen los siguientes resultados:
1.      ¿cuál es, según su valoración, el origen de los conflictos que se dan en su centro?
a.       Social: 51,3%
b.      Cultural: 15,4%
c.       Académico: 10,3%
d.      Emocional: 23%
2.      Cuando ocurre una situación conflictiva o problemática en su aula o centro ¿qué piensa que es mejor?
a.       Prevenirlo antes de que ocurra: 23,15%
b.      Enfrentarlo de manera inmediata: 16,84%
c.       Aprovechar esta situación para educar en valores: 28,4%
d.      Considerar el conflicto como un instrumento de aprendizaje: 23,15%
e.       Educar de forma permanente tanto si hay conflictos como si no: 8,46%
3.      ¿cuál cree que es el mecanismo más adecuado para gestionar los conflictos de convivencia que se dan en su centro?
a.       Mediación intercultural: 20,2%
b.      Mejorar la colaboración entre familias y el centro: 31,5%
c.       Trabajar de manera específica con alumnos conflictivos: 29,2%
d.      Desarrollar programas de competencias sociales en el centro: 19,1%
4.      Estos alumnos tienen, en ocasiones, conflictos emocionales que condicionan su aprendizaje:
a.       Muy de acuerdo: 17,9%
b.      Bastante de acuerdo: 38,5%
c.       Poco de acuerdo: 30,8%
d.      Nada de acuerdo 12,8%
5.      ¿valora los conflictos como una oportunidad para el aprendizaje en su aula y en el centro?
a.       Si: 75%
b.      No: 25%
Tras analizar los resultados de estas preguntas nos dice el autor que se puede ver una vertiente bastante clara a tratar los conflictos como un instrumento de aprendizaje, habiendo otro gran número de profesores que considera la educación en valores como elemento central para la resolución de conflictos. Sin embargo, también destaca que hay un porcentaje importante de profesores que elijen prevenir los conflictos antes de que sucedan, entendiendo de este modo el conflicto como algo negativo, asociado a violencia o a comportamientos orientados a la ruptura en lugar de la unión.
Por último, y tras la explicación del punto anterior llegamos al tercer punto titulado “La interculturalidad y el compromiso del profesorado para la gestión positiva de la diversidad en la escuela”.
Continuando con el tema anterior, este apartado continúa con una reafirmación de que cada vez más docentes ven los conflictos como algo positivo y como una oportunidad de aprendizaje. Presenta una refutación de que los conflictos surgen por problemas sociales y no de otro tipo, lo que hace que los profesores vean que los problemas a los que se enfrentan no son solamente formativos. Resulta curioso que hay una parte del profesorado que ve el conflicto dentro de elementos xenófobos y racistas, es decir, conflictos surgidos de la presencia de prejuicios, pero ni mucho menos representa un porcentaje importante.
Otro elemento de contraste dentro de este trabajo es el de la concepción de que los alumnos presentan problemas por determinados conflictos emocionales, sin embargo, hay una gran parte del profesorado que no lo ve así y por lo tanto no hay ningún problema que influya en su aprendizaje.
Olivencia también nos dice que los profesores para realizar una intervención pedagógica en situaciones de educación interculturalidad realizan una autoreflexión sobre lo que conciben sobre el conflicto intercultural y su manera de afrontarlo. Esto lo ve el autor como un reto para los profesores de ahora y del mañana. Todo esto implica una relación entre la pedagogía intercultural de los profesores y su concepción del conflicto. Los profesores, y sobre todo los que pertenecen a centros interculturales quieren que los principios interculturales primen en todas las escuelas, no solo en las suyas, lo que supondrá una integración efectiva, como dice el texto, de estos alumnos en cualquier ámbito. Todo esto lo podemos completar haciendo efectivas las actividades interculturales no solo a inmigrantes, sino también a al resto de la población escolar.
La interculturalidad debe ser vista como algo positivo, abierto y optimista. Esto lo podemos ver en las nuevas hornadas de profesores que participan de los centros interculturales, donde han mostrado un claro acercamiento a posturas más innovadoras de intervención pedagógica. Piensan que los alumnos deben sentirse queridos, al igual que su cultura y que esto quede plasmado en el currículo para hacer patente esa diversidad cultural que transmita unos valores culturales.
Los profesores ven la interculturalidad como una reflexión sobre el sistema educativo actual. Sin embargo, ha surgido un grupo minoritarios dentro de estos profesores que considera que hay que dar una respuesta práctica y ajustada y no solo quedarse en la reflexión. Hay que concebir la educación intercultural no solo como algo cultural, también como algo emocional, lo que hará que triunfe esta educación. Es ver que los alumnos se sienten queridos, que te pones en su piel y les entiendes, y además formas parte de su vida como dice la profesora de primaria.
Los profesores, cada vez más, valoran mucho mejor tener alumnos inmigrantes en sus clases ya que supone una gran fuente de riqueza, y pese a lo que se dice, son alumnos buenos y centrados. Aunque existe un desfase entre la teoría y la práctica de la interculturalidad, son muchos los profesores que eligen esta vía de enseñanza pedagógica por todo lo bueno que supone (optimismo, solidaridad,…).
La interculturalidad no debe ser solo conocer al otro, sino en hacer legítima esa diferencia para así utilizarla de manera educativa, en la convivencia y en el aprendizaje cooperativo.
Una vez finalizado el resumen del texto me gustaría proceder a presentar mis conclusiones y opinión personal:
Sobre este texto ciertamente no tengo que rebatir nada porque considero que lo que se expresa dentro de él sobre la interculturalidad es correcto.
La situación que vivimos en la actualidad en nuestra sociedad hace que cada vez nos demos mucha más cuenta de que estamos asistiendo a un auge del número de clases interculturales debido a la llegada de inmigrantes procedentes de diferentes países y zonas del mundo. Sin embargo, muchas veces y debido a lo cerrado de nuestro Sistema Educativo asistimos a un aislamiento y falta de integración de muchas de estas personas en la vida escolar de los centros por el mero hecho de que tenemos que cumplir unos objetivos para superar cada etapa.
Me gustaría explicar una experiencia personal. Yo vengo de Azuqueca de Henares y estudié en un centro de los que la gente consideraba problemáticos única y exclusivamente porque en él, por cercanía zonal, acudían la mayor parte de los inmigrantes que llegaban. Muchas de estas niñas y niños llegaban con más miedo que vergüenza y sin saber decir una palabra en español, y el centro, no sé si por falta de recursos o que, no hacía mucho por su integración más allá de un profesor de apoyo para que les enseñara a hablar y defenderse en clase. Estas niñas y niños en muchos casos pasaban año tras año, repitiendo o no, sin que nadie hiciera nada, hasta la llegada de Don José María, un profesor que venía de Sigüenza y que se convirtió en nuevo director en los últimos años que estuve en el colegio. Este hombre dedicó más medios y comenzó a pontenciar esta interculturalidad como algo positivo, pero sin ayuda de la junta o el estado haciendo mucho hizo con tan poco.
Además de esto, estaban los prejuicios existentes contra estas personas, muchas veces infundados y que los padres transmitían a los hijos, lo que hacía que muchos de mis compañeros los trataran como apestados, generando más conflictos con ellos que ellos con el resto de la clase.
Por todo esto considero que nuestro sistema educativo no hace lo que debería por potenciar una educación intercultural, integradora y que busque la solución de los conflictos de este tipo como algo positivo como dice el texto. No podemos estar supeditados a reformas educativas cada cuatro u ocho años que supongan un nuevo revés ideológico que no piense en la interculturalidad que está cada vez más presente en nuestra sociedad.
En primer lugar concibo la interculturalidad como algo positivo y beneficioso para nosotros. No hay nada más bonito que aprender lo que nos pueden ofrecer las diferentes culturas y los buenos valores que de ella podemos tomar. Es lógico que por cuestiones de prejuicios y mal entendidos surjan conflictos en clase, pero como profesores no debemos ser severos, sino ver en estos comportamientos y conflictos algo positivo a través de lo que poder llevar a cabo la enseñanza de esos objetivos de la educación intercultural a toda nuestra clase. Una manera de utilizarlos que creo que sería muy interesante sería aplicar un aprendizaje cooperativo en las clases, donde se potenciara la creación de grupos mixtos en los que hubiera chicos, chicas e inmigrantes.
Además, es muy cierto y que aunque nos parezca una tontería, muchas de las culturas presentes en nuestras escuelas o institutos no solo se enfrentan al problema de la formación, sino que también se enfrentan a distintos conflictos emocionales que pueden hacer mermar su aprendizaje. Muchos de estos niños y niñas no saben hablar español, y se enfrentan a la frialdad de las clases, de unas personas que no les comprenden y no pueden expresar todo lo que quieren decir. Para esto la solución es fácil, debemos dejar de lado los profesores los primeros la separación alumno-profesor para acercarnos y hacerles sentirse seguros y comprendidos, hacerles ver que hay alguien que les escucha y les puede ayudar.
También debemos mejorar nuestros planes de convivencia y dejar reflejados esos objetivos de educación intercultural en ellos, porque a través de unos planes de convivencia mejores podemos lograr mejorar y potenciar la interculturalidad.
Otro punto interesante, debería ser la formación tanto de profesores como de alumnos en valores interculturales. Hay muchos casos donde por las convicciones o la manera de pensar de algunos profesores, las medidas integradoras se convierten en medidas segregadoras donde se crean estudiantes de primera y estudiantes de segunda, siendo los inmigrantes estos últimos. Si formamos a esos profesores y les hacemos ver que no se puede hacer partícipe a los alumnos de su forma de pensar y que cada año se encontrarán con clases donde habrá más inmigrantes, podemos concienciarles de que es necesario aplicar medidas para tratar esa interculturalidad. A los alumnos, como he dicho antes, con hacerles trabajar juntos, con que los alumnos se escuchen unos a otros se puede hacer mucho para dejar prejuicios de lado y convivir todos juntos de una manera armoniosa.
En penúltimo lugar, me gustaría referirme a los cambios legislativos que se podrían llevar a cabo para mejorar la interculturalidad. Nuestro sistema educativo actual contempla la enseñanza de la Religión, el mayor respeto para los creyentes,  dentro del sistema público de enseñanza. Personalmente considero que es una medida que defiende todo lo contrario a la interculturalidad, y que debería ser sacada fuera del sistema educativo para introducir una asignatura donde se les enseñaran las culturas presentes dentro de su centro, donde se llevaran a cabo practicas y ejercicios para reforzar la integración, los objetivos interculturales y el conocimiento de las otras culturas. La asignatura de Educación Para la Ciudadanía podría ser un buen ejemplo, pero como es costumbre nuestra sociedad no está preparada para estos cambios tan radicales, y el cambio constante de las leyes educativas no beneficia para nada las medidas interculturales. Y la segunda cosa que cambiaría es la aplicación de planes de mejora o enseñanza que potenciaran la interculturalidad. No las utilizaría única y exclusivamente en centros donde hubiera gran número de culturas como estudia este texto, sino que las aplicaría en todos los colegios, ya sean públicos, privados o concertados, porque así podremos generar una sociedad con una conciencia igualitaria que buque lo que nos una y no lo que nos separe.
En definitiva, debemos conseguir como futuros profesores, aplicar estas medidas de mejora de la interculturalidad en nuestras aulas, quedarnos con lo positivo de los conflictos y aplicarlo como otro método de aprendizaje, que cualquier alumno que llegue a nuestra clase, sea de donde sea, se sienta uno más y no alguien diferente y que se sientan orgullosos de su cultura, porque como decía un profesor de sociología de mi carrera, “nosotros podemos ser los primeros diferentes”. Los profesores somos los primeros que podemos ser críticos con el sistema educativo y utilizar en nuestras clases la innovación pedagógica en cuestiones interculturales. Los profesores somos los primeros que podemos hacer que nuestros alumnos crezcan viéndose como iguales y no como diferentes, y que aprendan lo bueno que sus compañeros les pueden aportar sean de donde sean. Como dice la Declaración Universal de Derechos Humanos: “(…) nacemos  libres e iguales en derecho y dignidad (…)”
Para finalizar dejo dos enlaces. El primero de ellos es una canción de un rapero, Chojin, que creo que es muy significativa a la hora de hablar del tema que hemos tratado en este texto y de la sociedad actual, y el segundo es un anuncio de un coche, pero que resulta muy interesante al analizar que los niños no tiene prejuicios contra otras culturas o razas, sino que los generamos nosotros mismos:
Ø  “Rap Vs Racismo”: http://www.youtube.com/watch?v=n5lBl2K6RcU
Anuncio Mi Amiga Nerea: http://www.youtube.com/watch?v=MPo4EHYNTsk

Miguel Óscar Aparicio de Lucas